Como proteger una mesa, suelos de madera o mobiliario de jardín en el exterior
En este artículo vamos a ver cómo proteger la madera horizontal en exterior, como podría ser una mesa, suelos de madera o cualquier elemento de mobiliario de jardín. Hago hincapié en madera horizontal, ya que está mucho más expuesta que la madera en vertical, como serían paredes de madera, puertas o ventanas.. Los productos que podemos utilizar para la madera en horizontal siempre nos van a servir para la madera en vertical pero no al revés. En un futuro artículo veremos más opciones que tenemos para maderas en vertical.
En el vídeo de abajo podéis ver la aplicación del lasur al aceite de la marca Osmo, una casa alemana, que elabora todos sus productos con materiales naturales, aceites y ceras principalmente, y mi experiencia con ellos, es muy satisfactoria, productos de mucha calidad.
Normalmente para su uso en exterior, utilizamos maderas con una durabilidad natural propia, como las maderas tropicales… frondosas como el roble o el castaño o coníferas como el alerce… todas ellas son durables por su alto contenido en extractos, ya sean aceites, taninos o resina… Un consejo para la protección de todas estas maderas, es dejarlas expuestas sin protección entre 2 y 4 semanas, para que estos extractos se degraden superficialmente y permitan al aceite penetrar en profundidad, garantizando una buena ligazón entre el producto y las fibras de la madera. Esto en el caso de que la madera sea nueva.
En el caso de que la madera ya esté meteorizada o desgastada, simplemente procederemos a un lijado suave con grano 120. Si tenéis dudas sobre cual es la preparación adecuada para vuestro caso en particular, podéis poneros en contacto con nosotros.
Para la protección de la madera en el exterior, hay que tener en cuenta siempre la siguiente regla general: La protección constructiva prevalece sobre la protección física, y la protección física prevalece sobre la protección química.
Por ejemplo, en el caso concreto del vídeo de abajo, la protección constructiva ha sido elegir una madera durable al exterior por sus características naturales, madera de Iroko, y darle una caída para la evacuación del agua. En el caso del mobiliario de jardín, aunque parezca obvio, la mejor protección será colocarlo a la sombra o mejor aún en un porche!
Como protección física, en este caso, vamos a utilizar aceites y pigmentos principalmente. Aceites que van a repeler el agua de la madera y pigmentos que van a proteger la superficie de la radiación UV. Hay que tener en cuenta que a mayor cantidad de pigmento y más oscuridad, mayor protección. Por ejemplo una pintura aporta mayor protección y por más años que un lasur que deja ver la veta de la madera, y un lasur con pigmentos más protección que un aceite incoloro.
Y por último, como protección química, el lasur al aceite de osmo, contiene una pequeña cantidad de agente biocida, para evitar la proliferación de hongos en la madera.
La aplicación no tiene ningún misterio, remover bien el contenido antes de empezar, y aplicarlo en capas finas y uniformes en el sentido de la veta. Dejaremos secar por lo menos 12 horas y aplicaremos la segunda capa de la misma forma. Podemos valorar con el tacto, si nos interesa lijar suavemente con lija 180 o 240 entre manos. El lasur lo podemos aplicar bien con brocha, rodillo, pad, o un paño.
Una vez seco, tocamos la superficie para ver si hay alguna aspereza que merezca la pena eliminar con lija fina y procedemos a aplicar la segunda mano.
Como todas las superficies de madera, sobre todo en exterior necesitará un mantenimiento. En este caso, como se trata de una superficie aceitada, bastará con limpiarla y aplicar una nueva mano, cuando veamos que el aceite comienza a desgastarse, sin lijar ni decapar. Un mantenimiento muy fácil y muy rápido.